Scribo, ergo sum (Posteo, por lo tanto existo)
Abriendo con: Apple Shampoo. Blink 182
El aburrimiento mata las neuronas. Olvido cosas muy seguido, porque mi cerebro ya no se acostumbra a registrarlas al parecerle un acto tan vano. Mi rodilla va mejor, gracias por no preguntar.
Mi chika me hablo anoche, por telefono, en la posibilidad de una separacion debido a que se cambió de escuela, y eso va a hacer muy difíciles las cosas. Ya no nos veremos tanto como antes. De hecho ella sugirió que una noche a la semana me quede a dormir en su casa. Yo acepté, pero estoy seguro de que esto no servirá de mucho. He visto pasar estas cosas antes: parejas que se separan y prometen seguirse viendo, seguirse hablando, seguirse amando. Pero los corazones toman rumbos distintos y pronto se hablan una vez a la semana, luego una al mes, luego en ocasiones especiales, y las cosas se van alejando. Las distancias crecen y un día se encuentran, ya viejos, con una foto de aquel amor que juraron proteger y que ya habían olvidado, sepultados bajo otros amores, amigos, trabajos y acostones ocasionales.
El cielo llora en mi ventana. Es cierto, está lloviendo. Apropiado fondo para esta obra que se desarrola en mi teatro particular. Sospecho que el director ya prepara otra actriz que tome el lugar de mi chika, y solo espera su pie para entrar a escena. Excepto que la primma donna está a punto de abandonar la sala, y parece algo indecisa. Sin embargo, ya ha representado su papel hasta donde se esperaba de ella, y lo que queda es, como en toda la vida, improvisar, tocar de oido sobre la marcha.
Es un adios disfrazado, es un camuflaje para ocultar la nostalgia de un amor que ya no puede ser, una promesa k ambos sabemos que no podemos cumplir. Vamos a intentar seguirle, y hasta donde dé la cuerda.
El aburrimiento mata las neuronas. Olvido cosas muy seguido, porque mi cerebro ya no se acostumbra a registrarlas al parecerle un acto tan vano. Mi rodilla va mejor, gracias por no preguntar.
Mi chika me hablo anoche, por telefono, en la posibilidad de una separacion debido a que se cambió de escuela, y eso va a hacer muy difíciles las cosas. Ya no nos veremos tanto como antes. De hecho ella sugirió que una noche a la semana me quede a dormir en su casa. Yo acepté, pero estoy seguro de que esto no servirá de mucho. He visto pasar estas cosas antes: parejas que se separan y prometen seguirse viendo, seguirse hablando, seguirse amando. Pero los corazones toman rumbos distintos y pronto se hablan una vez a la semana, luego una al mes, luego en ocasiones especiales, y las cosas se van alejando. Las distancias crecen y un día se encuentran, ya viejos, con una foto de aquel amor que juraron proteger y que ya habían olvidado, sepultados bajo otros amores, amigos, trabajos y acostones ocasionales.
El cielo llora en mi ventana. Es cierto, está lloviendo. Apropiado fondo para esta obra que se desarrola en mi teatro particular. Sospecho que el director ya prepara otra actriz que tome el lugar de mi chika, y solo espera su pie para entrar a escena. Excepto que la primma donna está a punto de abandonar la sala, y parece algo indecisa. Sin embargo, ya ha representado su papel hasta donde se esperaba de ella, y lo que queda es, como en toda la vida, improvisar, tocar de oido sobre la marcha.
Es un adios disfrazado, es un camuflaje para ocultar la nostalgia de un amor que ya no puede ser, una promesa k ambos sabemos que no podemos cumplir. Vamos a intentar seguirle, y hasta donde dé la cuerda.
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